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jueves, abril 25, 2024

¿Influye la edad, o el entorno, en nuestra creatividad?


lego-286232_1920Algunos estudios muestran diferencias en la medida de la creatividad.

En concreto, reflejan que las puntuaciones en fluidez (habilidad para generar ideas) se incrementan desde tercer curso de educación primaria, permanecen estáticas en cuarto y quinto cursos, y decrecen significativamente a partir de sexto curso hasta la adultez.

Respecto a la originalidad, sus puntuaciones aumentan hasta quinto curso de primaria y decrecen significativamente a partir de sexto curso, aunque tienen cierto incremento no significativo en la adultez.

En cuanto a la elaboración, se incrementa hasta quinto curso de primaria, para permanecer estática en sexto curso y a lo largo de la enseñanza secundaria, aunque no significativamente, con un decremento significativo durante la adultez.

En conclusión, estos resultados significan que la habilidad de generar ideas (fluidez) se incrementa desde tercer curso de educación primaria y permanece estática en cuarto y quinto cursos, para decrecer a continuación, momento en el que las personas se fijan más en dar respuestas adecuadas a lo convencional.

La elaboración se incrementa a lo largo de la educación secundaria y decrece en la adultez, lo que justifica que los adultos eminentes generen buen número de ideas en etapas tempranas de su carrera, pero luego se centren en su elaboración.

La originalidad se incrementa hasta quinto curso de primaria, para decrecer en la adolescencia y volver a incrementarse en la adultez, como si estas mentes estuvieran abiertas a nuevas ideas hasta cierto nivel educativo, a partir del cual la presión de la convención condiciona esta tendencia.

En suma, el pensamiento creativo decrece o permanece estático a partir de sexto curso de primaria, lo que resta oportunidad de aplicación en la resolución creativa de tareas en la adultez.

Además, en este estudio se sugiere que el pensamiento creativo está decreciendo desde la década de los noventa, en especial desde los niveles de educación infantil y a lo largo de los últimos años escolares. El reto consiste en modificar la educación con el fin de impulsar la creatividad como motor para el avance social.


¿Qué podemos hacer los padres y/o educadores?

Las nuevas concepciones de creatividad van mas allá de la visión tradicional focalizada en los productos del genio o de la eminencia (gran creatividad), proponiendo la importancia de la creatividad cotidiana (mini creatividad), que permite una novedosa interpretación personal de experiencias, acciones y situaciones.

Esta creatividad tiene dos componentes, novedad y significación, mientras que la gran creatividad supone generar obras juzgadas como gran aportación por el entorno social.

La importancia de la minicreatividad es la de ser el punto inicial de la obra creativa, que, si se detecta, puede impulsar su realización y la expresión del talento creativo o de la superdotación.

La creatividad cambia con la edad, con una tónica creciente entre los 6-11 años, pero significativamente decreciente a partir de 12 años, que afecta especialmente a la originalidad, influenciada por el convencional funcionamiento convergente* de la escuela. (*pensamiento vertical, empleado para la resolución de problemas bien definidos cuya característica es tener una solución única. Universos cerrados, con límites definidos, con elementos y propiedades conocidas desde el comienzo que no varían a medida que avanza el proceso de búsqueda de una solución)

Si la capacidad creativa no avanza, incidirá en la menor realización del potencial de la alta capacidad y obtención de productos creativos relevantes para el avance social. Todo ello constituye un reto para la educación actual, que debería impulsar un cambio de paradigma para optimizar y no adormecer la alta potencialidad intelectual.

Fuente: Sastre-Riba S, Pascual-Sufrate MT. Alta capacidad intelectual, resolución de problemas y creatividad. Rev Neurol 2013; 56 (Supl 1): S67-76.

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